Deliciosa y fácil de preparar con ingredientes básicos...
Recetas de masa de pizza hay muchas, pero está es la que realmente me funciona bien, quizás en otra ocasión les comparta otras masas de pizza. Un detalle importante es que la masa les debe de quedar, apenas y ligeramente pegajosa, para que le de la textura y el tostado tan rico que nos encanta en la pizza.
Un consejo que les daré es estirar la masa lo más delgada que puedan, recuerden que por la levadura se va a levantar un poco y podría quedar más gruesa.
Los ingredientes son:
250ml de Agua
1/2 kg de harina
1/2 Taza de aceite
1 Cdt de levadura
¿Cómo prepararla?
- Ponemos a fermentar la levadura con el agua tibia, no muy fría porque si no no se activa, y no muy caliente porque de lo contrario, matamos la levadura.
Mezclamos la harina con la sal, esto es importante ya que si la levadura entra en contacto directo con la sal, no va a servir. - Seguidamente mezclamos el aceite con la levadura fermentada y agregamos la harina por partes, ya que dependiendo del clima puede que nos pida más o menos cantidad de harina o agua, hasta obtener una masa suave que no se pega en las manos, pero que se sienta ligeramente húmeda. Dejamos crecer la masa en un lugar caliente y tapado por 30 minutos a 1h.
- Una vez que haya crecido la masa, la desgasificamos completamente, amasamos y la empleamos como la necesitemos. La pueden mantener en refrigeración, ligeramente engrasada en un recipiente con tapa o cubierto con papel autoadhesivo y congelarla perfectamente por un máximo de 1 semana y media.