Un pancito sabroso, lleno de sabor y aroma...
El pan salado es de los que más me gusta, y sobre todo si tienen ajonjolí, tocineta o queso, para mi gusto personal, son de los mejores. Hoy se me ocurrió meterle pimienta negra molida al relleno, y le dió un toque super rico y especial, para ser honesto le puse aproximadamente unas 2 cdts casi 1 cda y quedó perfecto.
Queda perfecto para sorprender a las visitas con un pan rico, sencillo y con un toque diferente y especial; una recomendación es que le agreguen un poco más de quesito rallado encima para obtener esa hermosa superficie dorada.
Los ingredientes necesarios son:
1 cda de sal
1 taza de agua
1 cdt de azúcar
4 tazas de harina
1 cda levadura instantánea
125gr de mantequilla o margarina
Pimienta Negra
200gr de Queso Crema
150gr de Queso Cheddar Rallado
100gr de Queso Monterey Jack o Mozzarella
Preparación:
- En un recipiente mezclamos la harina con la sal, luego agregamos la levadura disuelta en el agua con azúcar, el huevo y la mantequilla cortada en trozos. Después de tener una masa uniforme, amasamos unos 10 minutos y dejamos reposar unos 30 minutos tapada.
- Amasamos, estiramos la masa con un rodillo y le damos forma rectangular, untamos el queso crema por toda la superficie, espolvoreamos los quesos rallados encima, y rociamos con pimienta negra molida al gusto. Enrollamos del lado más largo, y cortamos piezas del grosor deseado, es importante que tengan en cuenta que van crecer, ya que son capas enrolladas sobre sí mismas, personalmente de 3 a 4 cm me gustan mucho, lo cortamos con la ayuda de la técnica del hilo pasándolo por abajo y subiendo entrelazado para realizar un corte perfecto y fino; colocamos las piezas en una bandeja para horno con papel encerado o aluminio, yo usé los moldes de cupcakes, les puse un poco más de queso rallado encima y horneamos a 350°F de 20 a 30 minutos hasta que estén bien cocidos y doraditos.