Un clásico italiano con un delicioso giro....
Una combinación clásica es el jamón y el queso, y si añadimos el sabor fresco del tomate y la albahaca, el resultado es más que genial, incluso un toque se aceite de oliva infusionado o regular, le dará un sabor muy especial y delicioso.
Personalmente me encanta comerlos acompañados de jugos naturales, para no abarcara tantos sabores en una misma comida, y disfrutar del sabor de la focaccia; pueden hacerla casera, comprarla, usar la que te quedó de una comida anterior.. ect.
Los ingredientes necesarios son:
Preparación:
- Ok... el primer paso es totalmente opcional... pero se los recomiendo; existe una gran diferencia entre solo poner el queso en un sándwich, o bien en una sartén caliente ligeramente engrasada dorar y suavizar (hasta derretir si quieren) el queso, personalmente me gusta más dorarlo.
- Cortamos la Focaccia en cuadrados o rectángulos, partimos al medio, ponemos el queso, jamón, tomate y hojas de albahaca al gusto.
- Finalmente le damos un golpe de calor en la sándwichera, para dorar un poco más la base y la parte de arriba, además al calentarla queda más rica la focaccia.